Me sorprende cuánto tiempo le tomó a Japón decidirse a ejecutarlo. Sé que estos temas son complejos y no se pueden tomar al azar, pero cada vez que me encuentro con un caso como este, lo primero que salta a mi vista es la lentitud de la ley japonesa. Por otro lado, me imagino que la pandemia también influyo parcialmente en ese tema.
>>919>Me preguntó si el asesinato lo habrá hecho por un colapso mental o sencillamente padecía una enfermedad mentalSegún Tomohiro, “vine a Akihabara para matar a gente. Estoy cansado del mundo. Cualquier persona me valía”. Quién sabe si los psicólogos encontraría algo más en él.