>>31334Más o menos hace un año había pasado por una racha inceloide siendo rechazado románticamente por una y sexualmente por otras en una combinación dolorosa. Durante esos meses de vacaciones estuve expuesto a discusiones de las genderwars y a muchas mujeres expresando su odio a los hombres, tanto nacionales como de otros países dándome una imagen negativa del asunto.
Después de mi último rechazo tuve que viajar por una boda familiar y en una de las noches no podía dormir, andaba rezando y se me cruza el tema en la mente y los recuerdos de toda mi vida me dan un golpe depresivo, empiezo a llorar en silencio para no despertar a mi familia cerca, preguntando a Dios por qué crearme una mente totalmente defectuosa en esto y todo lo social y si mejor podía matarme pronto si la cosa nunca cambiará.
Días después, al volver a casa y desocuparme de unos asuntos me llega la suerte de conocer a una chica que vive al lado de mi universidad, se cansó de estar soltera y en la primera cita me dice que es re puta con ganas de sexo duro. Parece la cura a mi frustación sexual pero la relación no llega a nada tras meses de ponerme las bolas azules y quererme como un beta proveedor.
Lo gracioso es que sigo en mi racha de dry spell pero un año después con esta experiencia me siento menos angustiado por la falta de sexo y lejos de volver a llorar, sólo más lleno de odio.