>>2132La única vez que usé mileroticos me intentaron extorsionar. No confío en eso ni en locanto, que repitan mucho los números de teléfono es mala señal. Tienes que hacer tu búsqueda de putas individuales.
En ciudades suficientemente grandes como Monterrey es fácil encontrarlas en twitter, solo buscas "(ciudad) escorts" y cosas así, y saltas de un perfil a otro, hay como una puticomunidad allí. Dónde vivo he tenido más suerte en facebook agregando a chicas locales, las putas no tienen empacho en subir historias de su culo diciendo que están disponibles o promocionando sus onlyf. También he visto miniburdeles en departamentos promocionarse como páginas de facebook pero son más raras. Algunas putas buscan clientes por tinder. Sigo sin confiar en ninguna que pida depósito antes, es fácil estafarte.
Hace años (unos 6) era tan fácil encontrar agencias como googlear "(ciudad) putas/escorts", esas sí eran guapas y limpias aunque algo caras. Ahora no sé si es porque google es malo o porque el gobierno empezó a perseguirlos que ya no aparecen. Algunas ciudades como Monterrey o Tijuana aún deben tener agencias así.
Ya de manera establecida está el burdel semioficial barato en el centro de mi ciudad, hace mucho que no voy pero un amigo me dijo que mejoraron. A lo que más voy es a un puesto de masajes sexuales (paja), me gustan mucho sus chicas saben lo que hacen, aún no tengo lo necesario para negociar sexo con ellas.
Los tabledance/club a los que todos van son de mala muerte, y empezaron a quebrar con la pandemia. Encontré uno bueno y cuidado pero es muy caro, balance. (Aún así los mejores 8 minutos con la pija dura en el baile privado). Las cantinas tienen señoras culonas en minishorts pero lo siento de mala muerte, es una zona de putas clásicas callejeras pero muchos resultan transexuales y está vigilado, yo sólo veo.
Los de vieja escuela siguen recurriendo a estas zonas rojas y a los anuncios de periódicos.
Lo mejor se me hacen las tiendas de "masajes", ya no he encontrado putas individuales con las que quiera repetir aunque tenga sus números.